Creo que la mayoría de los costarricense estarán de acuerdo cuando digo que ya se acabó el tiempo para discutir temas intrascendentes, no solo en esta campaña política, sino también en las que están por venir. En aras de este esfuerzo por discutir ideas importantes para todos los ciudadanos, es que escribo estas líneas con la esperanza de que lleguen a los candidatos presidenciales y a sus equipos de trabajo, para su consideración.
Seguridad Jurídica. Los procesos judiciales deben ser más agiles y rápidos. No es posible que el sistema judicial costarricense tome en promedio 50 semanas para resolver un caso de familia, 75 semanas para un caso laboral, 130 semanas para un caso penal y 160 semanas para un caso agrario. Si esto no fuera suficiente, esto sucede cuando los casos se llevan a juicio ya que, según el Informe del Estado de la Justica, solo 1 de cada 10 casos penales llegan a ser juzgados. Es absolutamente necesario que en la ciudadanía disminuya el sentimiento creciente de impunidad de los delincuentes y ofensores que quebrantan la ley. Es urgente que los jueces sean evaluados por su desempeño en términos de la celeridad de los procesos y la calidad de sus sentencias apegadas al ordenamiento jurídico vigente
Eficiencia del Estado. Probablemente, la razón que más influye en la ineficiencia de las instituciones públicas, es la enorme dificultad que imponen los intrincados procedimientos administrativos para remover funcionarios por incompetencia y/o faltas graves, Además contribuye en este sentido, la falta de incentivos por desempeño y buen servicio al público, y no por puntualidad y antigüedad como sucede actualmente.
Los ciudadanos deben sentir que sus impuestos se usan de forma correcta y es así como propongo destinar una parte del pago del marchamo con el fin de que todos los dueños de vehículos dispongan de un seguro de responsabilidad civil por daños a terceros, colisión y vuelco. Se debe cerrar y/o reformar drásticamente las instituciones públicas que no cumplen con la misión para la cual fueron creadas. Deben fusionarse aquellas instituciones que duplican o triplican sus funciones.
El gobierno digital debe ser impulsado con toda energía y decisión. Estonia, un país pequeño como Costa Rica, tiene uno de los sectores públicos más eficientes del mundo. Esta eficiencia se basa en un gobierno digital totalmente desarrollado y omnipresente de forma que prácticamente cualquier trámite se puede hacer en línea en forma rápida y sin tropiezos. El lema de Estonia es que ningún dato se digita dos veces, ni por los usuarios ni por los funcionarios públicos. Estonia es, además, líder en eficiencia y simplificación tributaria por medio del sistema flat tax que aplica una tasa única muy baja a todos los niveles de ingreso. Propongo lograr un acuerdo de cooperación con Estonia para que nos asistan en mejorar sustancialmente la eficiencia de nuestro aparato estatal.
Inversión Privada y Emprendimiento. Uno de los grandes lastres que debe soportar la empresa privada en Costa Rica es la alta carga social del 26.3% que deben pagar los empresarios sobre los salarios, Tal como lo ha recomendado la OCDE, se debe reducir la carga social al 15% (promedio de los países miembros de la OCDE). Para compensar la disminución en los ingresos en el corto plazo de la CCSS, propongo traspasar la propiedad del INS a la CCSS. Esto no solo mejorará sustancialmente la competitividad del país, sino que también servirá para que el Estado pague su deuda con la CCSS, que data de muchos años atrás. Esta alta carga social hace que el 46% de la población económicamente activa se mantenga en la informalidad, lo cual se estima hace que la CCSS deje de percibir unos 216 mil millones de colones al año. Por cierto, estoy totalmente de acuerdo con que las cargas sociales las apruebe la Asamblea Legislativa, tal como lo propuso doña Lineth Saborío en uno de los debates de la precampaña del PUSC, no solo por ser una tarifa que tiene un gran impacto en la economía, sino porque realmente es un impuesto más.
Propongo convertir al INA en el Instituto Nacional de la Promoción del Emprendimiento y la Empleabilidad (INPEE). El objetivo de esta nueva institución será centralizar y facilitar todos los trámites que requerían las pequeñas y medianas empresas durante su periodo de formación (los primeros dos años) Además, debe servir de motor de la promoción de la creación de empresas, y algo muy importante, ayudar a las nuevas empresas para que pasen a la etapa llamada “scale-up”. Esto quiere decir que debe apoyar en todo y acompañar a los nuevos emprendimientos para que puedan superar los dos primeros años de su etapa de formación para convertirse en una operación sostenible en el tiempo. Esta es sin duda la fase más crítica para los emprendedores. Desde ya, se establecen las variables de medición del desempeño de la nueva institución: 1) la cantidad de empresas que auspicia para su formación, y la más importante: 2) cuantas de esas empresas que se formaron bajo su auspicio traspasan el umbral de los dos primeros años con buenos indicadores operacionales y financieros que les permita prosperar. La función de empleabilidad sería muy similar a la que actualmente ya desempeña: formar apropiadamente personas para los oficios y ocupaciones que el mercado laboral está demandando
Desempleo. Este es problema económico y social más grave y urgente que padecemos en Costa Rica, ya que las consecuencias del desempleo van mucho más allá de la falta de un ingreso para vivir. Las personas sufren problemas mentales y físicos, así como la pérdida de su autoestima. Además, el estigma social que produce el desempleo es enorme. Las familias se desintegran, las personas se divorcian y se pierde el respeto por los que una vez fueron la cabeza de la familia. “Se pierde el estatus, se da una desmoralización generalizada que se manifiesta somática o psicológicamente, o de ambas formas”, dice Ralph Catalano, profesor de salud pública de la Universidad de California en Berkeley. Existe investigación que indica que es más difícil recuperase de un largo periodo de desempleo que de la pérdida de un ser querido o de una enfermedad importante.
El desempleo es producido por la falta de dinamismo de la economía como resultado de un ambiente poco amigable para los negocios (débil demanda) y un déficit de las habilidades demandadas por las empresas por parte de la fuerza laboral (débil oferta). En Costa Rica padecemos de una significativa debilidad tanto en la demanda como en la oferta laboral. Hoy encontramos que un 60% de la fuerza laboral no ha concluido sus estudios secundarios, lo que limita enormemente la empleabilidad de estas personas y les hace prácticamente imposible optar por empleos bien remunerados. La situación del dominio del idioma inglés es muy similar. Solo entre el 10% y 15% de la población económicamente activa tiene un dominio práctico del inglés, lo que igualmente hace que un gran número de personas también tengan grandes limitaciones para optar por un empleo bien remuneradas. Para atacar estos dos grandes temas de empleabilidad propongo: a) que el INA facilite el ingreso a carreras técnicas a las personas que no han terminado la educación secundaria, dándoles cursos de nivelación para solventar sus carencias y así puedan ingresar a las carreras técnicas y b) es claro que los programas de bilingüismo que actualmente están siendo impartidos por el Ministerio de Educación no son efectivos, Se deben buscar opciones más audaces. En este caso, propongo que los profesores sean personas que hablen inglés como lengua nativa.
Debido a que las personas (hombres y mujeres por igual) que más problemas tienen para emplearse son los jóvenes entre 18 y 28 años, por ser jóvenes e inexpertos; y las personas de más de 50 años por su edad, propongo promulgar un incentivo similar al que ya existe en Colombia que permite a las empresas, aplicar directamente a su pasivo tributario lo pagado por concepto de cargas sociales sobre los salarios de las personas de 18 a 28 años y de las personas mayores de 50 años , que son contratadas a partir de la promulgación de la ley por los siguientes 4 años.
En los próximos artículos incluiré algunas propuestas para la Agricultura, Pesca, Energía, Pensiones, Salud, Medio Ambiente y Recursos Naturales y Cooperación Internacional.
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