Desfile de modas “El Clóset Humano” cierra exposición de Man Yu

San José, 25 nov (elmundo.cr) – La primera exposición del circuito Traje Humano se despide a lo grande con un desfile de modas en el que se presentarán alrededor de 35 trabajos inspirados y creados por los diseñadores de modas de la Universidad Creativa para amplificar el mensaje de Man Yu. Este evento de primera tendrá lugar el jueves 13 de diciembre a las 7 p.m. en la Galería Nacional (Centro Costarricense de la Ciencia y la Cultura).

Se procura que el público que entre a los salones expositivos no sea el mismo que salga de ellos y que el mensaje llegue a la mayor cantidad de personas para que reflexionen sobre el traje humano como el aspecto únicamente físico del ser. Lo anterior, por medio del desarrollo de la exposición en forma de circuito que abarca diferentes expresiones artísticas, involucra varias sedes expositivas de diferente naturaleza ejecutiva, promueve la participación activa de otros artistas y la interacción del público visitante, para, de esta forma, crear un mayor impacto y profundización en las personas.

En este evento, Man Yu, de la mano de Rob Chamaeleo, director de la carrera de modas, dirige a los diseñadores para promover el pensamiento introspectivo sobre la condición material/inmaterial de la existencia del ser humano, a través del aumento del nivel de conciencia sobre la condición efímera de los seres humanos en el plano físico y el reconocimiento de las limitaciones y habilidades de los trajes humanos como elementos diferenciadores de las oportunidades y obstáculos en la vida de cada persona.

“Quería que el mensaje de Traje Humano le llegara a la mayor cantidad de personas posible, pero ¿cómo validar este concepto de que la piel es un traje que vestimos?, no es sino sobre un desfile de modas donde las prendas se validan públicamente como prendas, como ropa” menciona Man Yu.

El proyecto Traje Humano

El pasado 1° de noviembre se inauguró el circuito cultural Traje Humano que agrupó en una sola exposición la colección pictórica e instalaciones de Man Yu junto con videoartes, videomapping y performances de artistas invitados, entre ellos Diego Esquivel, Nía Madrigal, Laura Barquero, Helen Núñez, Julián García y Vernny Argüello.

Por medio de la promoción de la introspección sobre la existencia física, los contenidos de Traje Humano apuntan a resolver, desde el origen, problemáticas personales sobre la percepción de imagen y la autoestima que se crean por la falta de conciencia sobre el propio ser de cada persona. Estos problemas a menudo afectan negativamente el desarrollo emocional y social de las personas, especialmente en su etapa de la adolescencia, y repercuten a lo largo de toda su vida por medio del condicionamiento de las decisiones que se toman desde una perspectiva personal disminuida y desvalorizada de su propia imagen.

Asimismo, al profundizar en que las diferencias que generalmente dividen a la sociedad son de origen meramente físico o material, el proyecto Traje Humano ataca problemáticas sociales discriminatorias, entre ellas la xenofobia, el racismo, el sexismo, la homofobia, la discriminación por discapacidades o por imagen, entre otros tipos de discriminación por tener trajes humanos distintos. De esta forma, al ser estos problemas inminentes en todas las épocas y lugares, Traje Humano contribuye a minimizarlos para crear un ambiente sociocultural más positivo para el desarrollo de las personas, especialmente como respuesta a las manifestaciones de odio que fueron evidentes en Costa Rica durante este 2018.

La exposición sigue abierta hasta el 16 de diciembre de 9 a.m. a 4:30 p.m. en la Galería Nacional. Posteriormente, se inaugurará en el Museo de Cartago el 27 de enero y en el Centro Cultural de España el 4 de abril, para la expansión del mensaje a segmentos de públicos distintos.

Más sobre Man Yu, la artista de Traje Humano

La inspiración de Man Yu se origina en un lugar interior, en la meditación, en un viaje en lo profundo de su tercer ojo y de sus demás chakras superiores. Así, de adentro hacia afuera, y con cierta influencia de su maestra espiritual Ching Hai y del gran artista Luis Caballero, a quien no conoció en persona pero ha admirado desde siempre, plasma en su lienzo impresiones muy íntimas para ella que, pese a su pasión por la anatomía humana, se originan piel adentro.

El trabajo actual de Man Yu se concentra aún más en esta parte intangible, originando una nueva línea aparte del hiperrealismo con el que se reconocen sus trabajos anteriores. Sin embargo, el elemento figurativo realista que caracteriza su obra no deja de destacar. Esto y la mezcla de técnicas tradicionales con las sutiles intervenciones de elementos tangibles que Man Yu adhiere, cose e incrusta en la pintura, la ubican en el contexto del realismo contemporáneo. Además, sus mensajes, cualquiera que fuera la época en la que viviera el público, responden a una realidad del momento, pues los conceptos que Man Yu trata, en el nivel más allá del plano físico, son libres de limitaciones geográficas o temporales, siempre contemporáneos al espectador.

De esta manera, se proyecta una ruta que inició en el hiperrealismo, pero apunta hacia lo abstracto como resultado de su constante y evidente transformación. Esta ruta atraviesa etapas como la actual en la que la limpieza estética, conceptos relativos al misticismo del ser humano y el fino detalle de inclusive los trazos sueltos son parte de la reconocible firma y pincel de Man Yu.

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