San José, 23 jul (elmundo.cr) – Decenas de personas se congregaron ayer en la Avenida Segunda de la capital para protestar contra el nuevo programa de educación sexual y afectividad que se impartirá -de forma obligatoria- en centros educativos a partir del 2018.
Bajo la consigna “con mis hijos no te metas” y “a mis hijos los educo yo”, los manifestantes -en su mayoría integrantes de iglesias evangélicas- desacreditaron el programa por estar “alejado de los valores cristianos” que antes imperaban en esas guías, una década atrás.
Durante el discurso de los participantes las expresiones eran similares: afirman no estar en contra de la educación sexual, más sí de la “ideología de género”, un invento para referirse despectivamente a los avances en políticas favorables a la igualdad de género y la libertad sexual, y así atacar las reformas en la educación sexual, la legislación sobre derechos sexuales y reproductivos, y el reconocimiento de la diversidad sexual.
En el año 2015, las autoridades gubernamentales aplicaron la última y más reciente “Encuesta Nacional de Salud Sexual y Salud Reproductiva” (cuyos datos fueron revelados a finales del 2016), y que han sido la base para la toma de decisiones y políticas públicas en materia de salud pública.
Una lectura del informe de 52 páginas arroja datos que demuestran que la educación sobre sexualidad y afectividad en el seno de los hogares costarricenses ha sido insuficiente (y en muchos casos inexistente). Es más, el 85% de los consultados durante la encuesta afirmó que la educación sexual debe implementarse en los centros educativos de primaria y más de la mitad dijo que debería estarlo desde antes de los 10 años.
DATOS QUE SE TRAEN ABAJO LA EFICACIA DEL “A MIS HIJOS LOS EDUCO YO”.
- A los 18 años de edad la mitad de las mujeres y dos tercios de los hombres que viven en Costa Rica han tenido relaciones sexuales.
- La mitad de las mujeres embarazadas entre 2010 y 2015 expresaron que su embarazo era “no deseado”. En el caso de los hombres, esa opinión era de uno por cada tres costarricenses.
- La población ve en los profesores y maestros la fuente de información idónea para aprender sobre temas de sexualidad. Esta posición es mucho mayor entre los más jóvenes.
- Menos de la mitad de los costarricenses puede identificar infecciones de transmisión sexual ajenas al VIH.
- El 98,4% de la población no puede definir correctamente las siglas VIH (Virus de Inmunodeficiencia Humana).
- El 70% de la población desconoce que el VIH puede transmitirse mediante la leche materna.
- El 36% cree erróneamente que el sexo oral puede practicarse sin representar un riesgo de contagio de VIH.
- El 84% cree erróneamente que el VIH puede transmitirse por compartir alimentos o no sabe que eso es falso.
- El 21% cree erróneamente que el VIH se transmite por estornudos.
- El 26% cree erróneamenteque el VIH puede transmitirse por picaduras de mosquito.
- El 36% cree erróneamente que el VIH puede transmitirse mediante el sudor de una persona infectada.
- El 57% cree erróneamente que el condón debe colocarse ante de la erección.
- El 53% cree erróneamente que las personas infectadas de VIH tienen aspectos enfermizos.
- El 33% cree erróneamente que el VIH puede transmitirse por compatir servicio sanitario.
- 1 de cada 3 mujeres manifestó haber sufrido algún tipo de abuso u hostigamiento sexual.
- Entre los hombres mayores de 50 años menos de la mitad se ha hecho un examen rectal de la próstata y uno de cada cinco un examen de testículo.
- 1 de cada 10 mujeres embarazadas al momento de la encuesta declaró ser fumadora activa.
- Cada día se dan 34 partos en niñas de 12 a 17 años en Costa Rica (según estadística del 2014 del INEC).
- Los partos en menores de edad representan el 13% del total de partos en Costa Rica.
- En 2014 se presentaron 12.508 partos en jóvenes menores a 19 años de edad.
- En 2014 se presentaron 705 abortos, de los cuales 45 fueron inducidos.
- La mayoría de las primeras relaciones sexuales en mujeres se da en el marco de relaciones impropias, ya que el violador (según la nueva legislación) es de cinco o hasta 10 años mayor que la víctima.
- Los hombres tienen poca o nula participación en los procesos de anticoncepción.
- Existe un desconocimiento prácticamente generalizado de la anticoncepción de emergencia.
- Solo una cantidad minoritaria de hombres utiliza siempre condón en las relaciones sexuales.
- Una mayoría cree erróneamente que el VIH es una infección exclusiva de la población sexualmente diversa.
- La proporción de mujeres que se hacen la citología con la frecuencia recomendada según la norma vigente, es mucho menor.