Bruselas/Madrid, 9 sep (dpa) – España acogerá a 14.931 refugiados de los 120.000 que la Comisión Europea propuso hoy reubicar en 22 de los 28 países de la UE después de haber entrado en Grecia, Italia y Hungría, la mayor parte huyendo de la guerra de Siria.
Según confirmó hoy la “número dos” del gobierno español, Soraya Sáenz de Santamaría, el Ejecutivo acepta así la propuesta lanzada por la Comisión Europea, que sitúa a Alemania, Francia y España como principales receptores de desplazados.
La cifra reclamada a España supone el 12,4 por ciento del total y es la tercera más alta fijada por el Ejecutivo de la Unión Europea (UE). Le preceden Alemania, que deberá aceptar a 31.443 refugiados, y Francia, con 24.031, según confirmó la Comisión Europea en un comunicado.
Para establecer el reparto de cuotas, el organismo presidido por Jean-Claude Juncker ha tenido en cuenta la población de los países, el Producto Interior Bruto (PIB), el nivel de desempleo y el promedio de las recientes solicitudes de asilo en cada uno de ellos.
España aceptará finalmente el triple de refugiados de los que Bruselas le solicitó en mayo, cuando la crisis migratoria que vive Europa no había alcanzado el nivel actual.
Hoy, Sáenz de Santamaría dijo que el Ejecutivo español trabaja “intensamente” para que los desplazados no solo tengan garantizada la acogida sino también “la integración a medio y largo plazo” en el país.
El gobierno conservador de Mariano Rajoy, contrario en un principio a las cuotas obligatorias de refugiados, rectificó en los últimos días y aseguró que aceptaría la propuesta de la Comisión Europea.
“Yo no me voy a poner a discutir cifras a estas alturas y con la que está cayendo. España va a ser solidaria y no va a discutir las cifras. Aceptaré lo que la Comisión nos vaya a plantear”, dijo hoy el jefe del Ejecutivo, antes de que se hiciera pública la propuesta de Bruselas.
Para Rajoy, la solución a la crisis migratoria que vive Europa pasa por la cooperación en los países de origen y tránsito. El presidente del gobierno español demandó hoy de nuevo “una política integral y global” para afrontar la cuestión.
